El Silencio También Habla

 

"A veces me hablaste de una vez

En otras tu silencio solo escuché

Que interesante, tu forma de responder..."

Esos son los versos de una alabanza compuesta por Richy Ebert Perez, una hermosa alabanza que más de alguna vez nos ha tocado y nos hemos sentido identificados con su mensaje principal.

Y es que en estos tres versos se centra una verdad incómoda, que es vital para que podamos crecer dentro de nuestro peregrinar cristiano. Estoy completamente seguro que todos, en algún momento, hemos pasado por momentos en los que deseamos escuchar la dulce voz del padre. aunque sea solo para asegurarnos que estamos dentro del propósito de El. Ya sea para orientarnos o para corregirnos, pero anhelamos escucharlo.

 A veces ese silencio nos puede paralizar o. peor aún, puede hacer que nos enredemos más. Y eso puede llevar a que tengamos un concepto erróneo de las cosas que suceden. es normal tener pensamientos como: "D-s se olvido de mi, He sido desechado por D-s, He pecado tanto que no hay salvación para mi"  

Pero, por absurdo que parezca, aún en el silencio, D-s nos esta hablando; aún cuando pareciera que es indiferente a nuestro dolor o sufrimiento, El se mantiene con total atención a nuestro comportamiento

 

El silencio como respuesta de D-s

Una de las etapas más duras y difíciles, es precisamente cuando nos encontramos a la deriva en medio del desierto, puesto que es ahí donde nuestra fe es puesta a prueba, y la única forma de avanzar y eventualmente salir es recordando la voz de aquel que nos llamó.

Pero cuando estamos en el desierto, en muchas ocasiones, por no decir en todas, El guarda silencio cada vez que le clamamos. Pero ¿Qué hacer en esas circunstancias? ¿Cómo actuar? 

Como dije anteriormente, por más absurdo que parezca, en el silencio, El sigue hablando.

Para un músico profesional, o incluso para alguien que tenga un conocimiento de notación musical, esto es algo normal, ya que  el silencio también es música.

Déjeme explicarlo mejor, en música, un silencio se utiliza para proporcionar un tiempo de descanso al intérprete musical (y de respiración, en el caso de cantantes e instrumentos de viento). Es decir, el propósito es dar un respiro en la ejecución de la pieza musical.

¡Y vaya que en esos tiempos SI necesitamos un respiro! 

Sofonías escribía al respecto:

"El Señor está en medio de ti, y te salvará con su poder; por ti se regocijará y se alegrará; por amor guardará silencio, y con cánticos se regocijará por ti."

Note como el profeta afirma, "el Señor está en medio de ti". NO dice cerca de ti, o atrás de ti, no, El esta EN MEDIO, aunque no lo sientas, aunque no lo mires, El está en medio. Al igual que estuvo con su pueblo, Israel, en el desierto, durante su peregrinaje hacia la tierra prometida.

Lo más interesante es que nos afirma: "por amor guardara silencio". ¡Cómo es posible que D-s guarde silencio ante el dolor de su pueblo! y peor aun, ¿Porqué dice que lo hace "por amor"?

Las respuestas a esas preguntas tienen una sola: LA SABIDURIA DEL ETERNO.

 

 Del desierto, el silencio y la salvación

Pero apelar a la eterna sabiduría de D-s, suena como una respuesta fácil y, hasta cierto punto dogmática, muy similar a decir: D-s así lo quiso; respuesta que si bien es valida y verdadera, no evita que sintamos un amargo sabor en el alma.

 Y es que me niego a creer que un D-s que es capaz de crear universos perfectos, decida guardar silencio, solo porque sí, cuando uno de sus hijos esta pasando por una prueba muy difícil. sin lugar a dudas tendrá un propósito su silencio.

Tal ves la respuesta a estas preguntas las encontremos en un pueblo nómada de África: los Tuareg. Este pueblo al ser nómadas del desierto de Sahara, saben muy bien lo que el desierto esconde, y una de las mas grandes lecciones que podemos aprender, es que, en el desierto existe el silencio.

Ellos saben que, estando en medio del desierto, rodeado del inmenso silencio, eres capaz de escuchar los latidos de tu propio corazón, entonces dicen: No hay mejor lugar para hallarse a uno mismo que el desierto...

Tal ves ellos sepan algo de la sabiduría del Altísimo que nosotros no, tal ves el verdadero propósito de transitar un desierto sea, encontrarnos a nosotros mismos, conocernos a fondo y descubrir nuestras limitaciones; pero no para creernos dioses; sino para reconocer qué cosas somos capaces de hacer y en qué otras debemos dejar que D-s actúe.

Sin lugar a dudas, el silencio de D-s es precisamente para que, volvamos la mirada hacia nosotros y busquemos que cosas debemos cambiar, su silencio es ahora una especie de espejo donde debemos reflejarnos, y ver nuestros errores, limitaciones y debilidades, deja de ser una prueba y se convierte en la oportunidad perfecta para reconocer lo hermoso y grande que nuestro Creador es.

¿Cómo estoy tan seguro de eso? Porque El mismo lo dijo a través del profeta Oseas:

"Yo la voy a enamorar: la llevaré al desierto y le hablaré al corazón"